Marina vestia un abrigo de cachemir blanco. Sus aretes de perlas blancas la hacian lucir gentil y carismatica.
Sélo el chal alrededor de su cuello ya valia mas de mil délares.
El vendedor se acercé a ella y la saludé de inmediato.
“Sefiora. Miller, sel Sr. Miller no esta aqui hoy para elegir joyas con usted? Hay algunas novedades. Cada uno de ellos le vendria genial, sefiora Miller. La pieza de esmeralda quepediste que te reservara esta aqui. Pruébalo mas tarde. Estoy seguro de que le sentaria muy bien a tu cutis”.
El vendedor puntué casi todas las frases con “Sra. Miller” sélo para untar a Marina a pesar de que ella y Ethan aun no estaban legalmente casados. Marina mird a Olivia con una sonrisa y una mirada de orgullo en sus ojos que mostraba su victoria.
Todos sabian que Ethan la trataba como al tesoro mas preciado, pero no sabfan que Olivia era su esposa legalmente casada.
Olivia apret6 los pufios. ;Por qué tuvo que toparse con la persona que menos queria ver en su momento mas embarazoso? Marina dijo suavemente: “Perderds mucho dinero comerciando con un anillo de buena calidad como ese”.
Olivia extendié la mano y le arrebatd la caja con expresion férrea. “Ya no lo venderé mas”, dijo.
“iNo? Qué verdadera lastima.gusta mucho ese anillo. Incluso estaba planeando ofrecerte un premas alto ya que nos conocemos. ;No tenia prisa por conseguir dinero, sefiora Fordham? La mano de Olivia se puso rigida. Sf, ella también necesitaba dinero desesperadamente. Por eso Marina la insultaba tan implacablemente.
Follow on NovᴇlEnglish.nᴇtEl vendedor le aconsejd. “Sefiorita, esta es la prometida del presidente del Grupo Miller. Tienes mucha suerte de que tu anillo le haya llamado la atencién. Seguramente le pagara un buen prey no tendré que esperar a que completemos los procedimientos para recibir su dinero”. EB A Olivia le pareci6 una burla que el vendedor siguiera mencionando “Sra. Molinero.” Hace un afo, le habia dicho a Marina con confianza que nunca se divorciaria de Ethan y le habia pedido que se rindiera. En sélo un afio, todos, altos y bajos, sabfan quién era ella.
Olivia se sentia cada vez mas convencida de que su matrimocon Ethan no era mas que un plan.
Al darse cuenta de su vacilacién, Marina sonrié alegremente y dijo: “Sra. Fordham, por qué no dices un precio? La expresién arrogante de esa perra disgusté a Olivia. Ella dijo friamente: “Ya no lo venderé”.
Sin embargo, Marina no lo dejo pasar. “EM. Fordham, ya estas al final de tu cuerda. Nodigas que todavia te importa la dignidad. Si fuera td, lo venderia inmediatamente. ; Nadie te ha dicho nunca que la terquedad no te queda bien? “Qué broma, sefiora Carlton. Robar a otras personas sus cosas te ha hecho pensar que realmente las posees.
(Por qué no vas a robar un banco? Mientras peleaban, el anillo sali6 volando de la caja trazando un elegante arco y cay al suelo con un suave tintineo. Olivia inmediatamente corrié hacia él, pero el anillo se detuvo junto a un par de elegantes zapatos de cuero junto a la puerta.
Cuando Olivia se agaché para recogerlo, una gota de agua goted sobre su nuca y le provocd escalofrios. Levanté la vista lentamente hacia un par de ojos frios y sin emociones.
Ethan todavia sostenfa un paraguas abierto y gotas de agua goteaban sobre su cabeza. El abrigo de lana negro que llevaba realzaba su figura y le hacia lucir elegante.
Olivia lo miré fijamente y recordd la primera vez que lo vio. Ethan, de 20 afios, vestia una camisa blanca mientras estaba en el campo bafiado por el sol, pero era como si hubiera estado parado justo dentro de su corazén. Esa imagen quedé grabada en su mente desde los catorce afos.
Ahora llevaba un suéter que la hacia parecer ain mas delgada con su material borroso. Tenia la barbilla afilada y parecia mas delgada que hace tres meses. El parecia grandioso e incomparable, mientras que ella parecia miserable y patética.
La mano de Olivia, que estaba a punto de coger el anillo, se detuvo en el aire. Mientras ella estaba aturdida, Ethan levantd inexpresivamente el pie y pisé el ring al pasar junto a ella.
Olivia permanecié agachada. Ese anillo habia sido disefiado segln su gusto. Su diseno era exagerado, pero tenfa un estilo Gnico. Sélo habia un anillo asf en todo el mundo.
Después de que él se lo puso, Olivia nunca se lo quité excepto cuando se estaba duchando. Si no fuera porque esta vez realmente necesitaba desesperadamente dinero, no habria tomado tales medidas.
Sin embargo, lo que era un tesoro a sus ojos era simplemente basura sin valor para él. No solo habia pisado el ring, sino también el pasado que ella trataba con tanto carifio.
Marina sonri6 y se acercé a €l mientras le explicaba: “Ethan, estas aqui. Estaba escogiendo joyas cuando vi a la sefiora Fordham vendiendo su anillo”.
La fria expresion de Ethan no traicionaba ninguna emocién. Su mirada helada se posé en Olivia mientras ella hacia todo lo posible por reprimir su furia. Luego pregunté: “; Quieres vender ese anillo?”.
Olivia contuvo las lagrimas y se mordid el lapara evitar llorar. “Si. jLe gustaria comprarlo, sefior Miller? Ethan sonrié burlonamente y dijo: “Recuerdo quedijiste lo importante que es ese anillo para ti. Puedo ver lo sincero que eras ahora. Cualquier cosa que alguien mas ignore no tiene valor para mi”.
Cuando Olivia estaba a punto de responder, sintié un dolor ardiente en el estémago. A medida que el tumor crecia, el dolor pasé de ser un dolor leve a un dolor punzante.
Mir6 a la pareja, que parecia una pareja hecha en el cielo con sus abrigos blancos y negros a juego bajo las luces brillantes. De repente perdi6 las fuerzas para explicarse.
Un hombre cuyos sentimientos habian cambiado no se molestaria incluso si ella le entregara su corazén.
Olivia luché contra el dolor y recogid el anillo. Luego, regresé lentamente al mostrador para recuperar la caja y el certificado. No queria mostrar debilidad delante de Ethan. Aunque el dolor fue suficiente para hacerla desmayarse, alin mantuvo un paso firme.
Follow on Novᴇl-Onlinᴇ.cᴏmCuando pas junto a él, dijo suavemente: “Al igual que td, lo traté como un tesoro la Ultima vez, pero ahora es solo una pieza de metal que puedo cambiar por dinero”.
Ethan sintié que algo andaba mal con ella. Tenia la frente perlada de sudor y su rostro estaba tan blanco como una sabana. Parecia como si estuviera haciendo todo lo posible para luchar contra algin tipo de dolor.
De repente, la agarré del brazo y dijo en voz baja: “¢Qué pasa?” Olivia le sacudi6 la mano y dijo: “No tiene nada que ver contigo”.
Ella no le dedicé otra mirada e hizo todo lo posible por mantener la espalda recta mientras desaparecia de su vista.
Ethan la irse. El habia sido quien la dejé ir, pero por qué todavia le dolfa el corazén? Olivia fue a un rincén desierto y, nerviosa, sacé sus analgésicos de su bolso. Sabfa que todos los tratamientos y medicamentos contra el cancer tenian efectos secundarios, por lo que solo compré algunos analgésicos y medicamentos para el estémago, lo cual era mejor que nada.
Mirando la fuerte lluvia, pensé: “¢Es esa la Unica opcién quequeda?” Esa era la Ultima persona que queria conocer, pero no tuvo més remeque arriesgarse por el bien de su padre.
Olivia fue a casa para limpiarse antes de tomar un taxi a Hawthorn Villa. Cuando regresé al pais hace mas de un aio, esa persona llamé a Olivia una vez.
No se habian visto en més de diez afios y Olivia no tenia idea de cémo estaba. A juzgar por la gran villa, Olivia supuso que le habia ido bastante bien.
Después de explicarle el propdsito de su visita, una criada condujo a Olivia a la sala de estar, donde estaba sentada una elegante mujer. Era tan hermosa como Olivia la recordaba.
“Liv”, dijo la mujer mientras miraba a Olivia con sus bonitos ojos.
Sin embargo, Olivia no se atrevié a llamarla “mama”.